Vuelta a casa. Reencuentros, conversaciones, largos cafés.... Volver a recorrer las calles que tanto había pisado hace un tiempo. Todo sigue igual... o no. Siempre hay cosas que cambian, desde una farola, un edificio, hasta la gente que te acompañaba por aquellas calles ahora reformadas.
Disfruto las horas de este nuevo verano, aprovechando todo lo posible con la gente que pronto dejaré de ver, deseando llegar a la orilla del Mediterráneo, por su gente, por su encanto y, sobre todo, por las horas de reflexión que ello conlleva. Este año con más ganas que nunca. Deseando pasar un gran verano, deseando una de esas conversaciones mientras amanece, deseando que vengais unos días...
Sólo queda esperar y dejar que pase el tiempo...
Aqui no huele a mar ni hay sonido de brisa...
ResponderEliminarPero no por eso dejamos de echarte de menos :)
Que el Mediterraneo no te cambie.
el mediterraneo calienta.
ResponderEliminar:) Madrid enfría
Conozco tan bien esas sensaciones...yo también tendré mi dosis de mediterráneo...para mí llega un punto que es hasta necesario. Sobre todo, por las horas de reflexión y diversión. Que al final quedan en instantes. Pero son los que recuerdas cuando vuelves...
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